El kumbhamela es la celebración religiosa más grande del mundo. Se lleva a cabo en India y reúne a millones de practicantes del hinduismo. Acá te presentamos algunas razones para visitar Kumbhamela.

Kumbhamela, la festividad más importante del hinduismo

El hinduismo se caracteriza por ser una religión muy colorida, en la que abundan numerosas festividades basadas en leyendas y mitos. Sin embargo, existe una de ellas que resalta por su increíble devoción y asistencia en masa, el Kumbhamela o Kumbh Mela.

Durante este evento, se dan cita decenas de millones de peregrinos venidos de todas partes de India y del mundo entero. Ellos buscan evocar la leyenda hindú del batido del océano de leche, en la que los dioses y los demonios se aliaron con la finalidad de crear un néctar de la inmortalidad.

En medio de este escenario, el dios Dhanu Antari sufrió el robo del kumbhá, que era el envase que contenía el néctar, por parte de los demonios. Este episodio ocasionó un enfrentamiento entre los dioses y los demonios que duró doce días y doce noches, lo equivalente a doce años en la Tierra.

En medio de las batallas, gotas del néctar de la inmortalidad cayeron en cuatro puntos de India. Estos fueron Hardwar, Nasik, Prayag y Ujjain.

Gracias a esta leyenda, esas cuatro ciudades indias son consideradas como sagradas. En ellas se lleva a cabo la asamblea (mela) del envase (khumbá), o kumbhamela. El evento se realiza cuatro veces cada 12 años, en una ciudad distinta por cada turno.

Lo más impresionante de visitar Kumbhamela

Visitar Kumbhamela puede ser una experiencia fascinante para cualquier viajero. Durante esta celebración podrás ser testigo de las diferentes manifestaciones de devoción del hinduismo. Por eso, tu viaje a India será único y enriquecedor desde el punto de vista espiritual.

Para empezar, el kumbhamela se inicia con llamativos desfiles y ceremonias en las que se recibe a los sadhus. Estos son los practicantes más santos y puros del hinduismo, quienes llevan un estilo de vida asceta. Se les debe gran respeto y admiración.

Su ingreso a la ciudad se realiza mediante camellos, elefantes, caballos, e incluso carruajes que son llevados por otras personas. Se les demuestra de máxima devoción. Los peregrinos reciben a los sadhus con cánticos y pétalos de rosas. Luego, estos siguen su recorrido y saludan a la masa.

El momento más impactante llega cuando los hombres santos se dirigen al agua del río Ganges, donde se cree que fluye el amrita o néctar de la inmortalidad, el cual es capaz de limpiar de todos sus pecados a cada creyente y también a 88 generaciones de sus antepasados.

Luego que los hombres santos salen del agua, se envuelven en cenizas. Después, los peregrinos comunes pueden bañarse en el río.

Además de cumplir con este ritual, los peregrinos se dedican a recorrer los campamentos de los sadhus. Estos personajes dan su bendición al público a cambio de alguna limosna. También es posible que durante el kumbhamela se inicien nuevos sadhus en la vida asceta.

Por si fuese poco, viajar a India durante el kumbhamela te sorprenderá al encontrarte con decenas de millones de personas unidas por la espiritualidad, más allá de su origen o clase social. Esto convierte la peregrinación en un encuentro de masas incluso superior a festivales como Diwali o Holi.

Cómo llegar al Kumbhamela 

Indistintamente de su creencia religiosa, presenciar un kumbhamela puede cambiar la perspectiva de cualquier persona.

El visitante será testigo de una tradición milenaria que integra a todo el pueblo hindú. También registrará imágenes inigualables, llevando consigo uno de los mejores álbumes de fotos que cualquier viaje podría ofrecer. Finalmente, visitar Kumbhamela será toda una experiencia de vida.

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Conocer kumbhamela puede complementarse con visitas a otras ciudades como Agra y Varanasi en el norte indio. En Agra conocerás el imponente y mahestuoso Taj Mahal. En Varanasi apreciarás la ferviente actividad de los ghat, a orillas del río Ganges.

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